Sin dudas, y como ha quedará demostrado a lo largo del presente documento, tanto la formación del primer Programa de Especialidad en Implantología Bucomaxilofacial de latinoamérica,
como el origen de la Sociedad de Implantología Oral de Chile, tienen directa relación con la unificación de criterios, al entendimiento por parte de los distintos grupos de estudio de que la oseointegración debía, necesariamente, ser un concepto que revolucionaría a la implantología y que necesitaría para su desarrollo en nuestro país del conocimiento, las ganas y visión de cada persona que se interesara en esta promisoria área de la odontología.
El reconocimiento de la Implantología Oral como especialidad de la odontología en Chile, no estuvo exenta de dificultades, desacuerdos, críticas, presiones…
Esta historia es contada gracias a las ganas y la inquietud por la investigación y desarrollo clínico de diversos grupos de estudio, compuesto por especialistas de distintas ramas de la odontología, sumado a la confección del primer programa de especialidad en Implantología Oral y Bucomaxilofacial en latinoamérica, desarrollado y presentado por docentes de la facultad de Odontología de la Universidad de Chile, más la visión y empuje de cirujano dentistas convencidos de la revolución que supondría el advenimiento de la oseointegración y los implantes dentales, pero más que todo a la unificación de criterios, el respeto, el consenso y el trabajo en equipo.